Las marcas enfrentan un desafío crucial: conectar con la Generación Z, un público que prioriza la veracidad, los valores sociales y la interactividad. Los nacidos entre 1997 y 2012 han crecido en un entorno digital que redefine constantemente los códigos de comunicación, empujando a las empresas a evolucionar sus estrategias para conseguir ser relevantes.
Los consumidores convirtieron el anuncio de 30 segundos no saltable en un éxito hace décadas. Los telespectadores sabían que podían relajarse viendo sus programas favoritos y, de paso, disfrutar de pequeñas dosis de contenido publicitario. Frases hechas, jingles y campañas icónicas se convirtieron en parte de la cultura pop.
A la movida de fin de año no le faltaron ingredientes. Si en 2023, la industria publicitaria finalizaba pendiente de qué pasaría tras la fusión de VMLY&R y Wunderman Thompson, en 2024 se redobló la apuesta tras anunciarse la adquisición de Interpublic Group of Companies por parte de Omnicom.
Los datos del último Estudio General de Medios (EGM) de 2024 confirmaron que Internet sigue liderando la penetración mediática en España con un 88,9% de la población interactuando con este medio, lo que refleja una clara preferencia por el consumo de contenido digital.
En su último informe económico del año, la comisión regional de las Naciones Unidas propone una serie de políticas para que la región pueda salir de la trampa de baja capacidad para crecer en la que está sumida.